martes, 10 de diciembre de 2013

El niño del gorrito

Era un chaval que conocía a todo el mundo, aunque yo no lo había visto hasta entonces. Un vividor y un cachondo mental, tenía ese buenrollismo que a todos encandilaba aunque a más de uno le podría exasperar por lo extrovertido. Parecía que iba de speed todo el rato; le encantaba hablar, hablar, hablar y hablar.... era raro que se callara.

Eso si, tenía mucho MUCHO morbo. Era un truán con las damas, pero de buen rollo, no sabías si ligaba contigo o era ya así con todas y con todos. Conocí a este terremoto en un picnic multituinario donde se apuntaron los amigos de mis amigos y los amigos de sus amigos...¡uf vaya lío! Allí entre el gentío nos caimos bien y acabamos dándonos los teléfonos.

Iba en bici la noche que fui a su casa y nada más llegar, con toda la confianza del mundo me pegué una ducha para quitarme el sudor del viaje y prepararme para sudar de otro modo. Estubimos hablando, riendo, vacilandonos....nos besamos y al poco ya estábamos quitándonos la ropa. Èl estaba tremendo. Un macho-man ibèrico con el pecho marcado, ni un gramo de grasa, un culito prieto, unas nalgas duras y entre las piernas un cacharro mas grande que él al que habría que ponerle; nombre, apellidos y hasta un piso en Mallorca. ¡Con razón presumía tanto! y no es que eso fuera precisamente sexy (lo de presumir) que incluso llegaba a ser molesto, pero se vé que a más de una la había dejado con la boca abierta y el coño bien relleno. Esa noche esa "una" era yo, y después de verlo en cueros había que probar ese cuerpazo.

Y como buenos folladores estubimos toda la noche comiéndonos bien agusto enteros de arriba abajo, follando de todas las maneras posibles y jadeando como animales. Él me rellenaba por todos los agujeros como un pavo con la herramienta que se gastaba. Se sabía mover como pez en el agua dentro mía culenado ritmicamente con ese culito tan prieto y musculoso mientras decia muy caliente ¡¡ ay que rico, ay que rico, ay que ricooooo!!


 Después de los polvazos, aún desnudos entre las sábanas era muy cómico ver como cogía un gorrito de lana y se lo ponía para dormir.


FICHA TÉCNICA:


Nombre: El niño del gorrito

Personalidad: Vivarracho, dicharachero y divertido.

Aspecto físico general: Era como Gonzo el de los teleñecos.


Tamaño y forma del miembro: como dice en mi tierra; "cuant més nàs, mes cabàs." (cuanta más nariz, más "capazo")

El encuentro sexual: Todo un expero en la cama que hacía las delicias con su lengua y su miembro.

Frases que me pasan por la cabeza: ¡¡ohh Dioxxxxxxxx!!

¿Se lo recomendaría a una amiga?: ¡Claro! un buen polvo te llebas seguro, ahora tendrás que aguantar que hable por los codos.

Valoración final: un 9, porque, obviamente luego te dejaba dolor de cabeza.

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